Muchos pacientes van al fisioterapeuta solicitando un drenaje linfático. Pero, ¿qué es la linfa?
La linfa es un líquido casi incoloro, que aparece como resultado del exceso de líquido que viene de los vasos sanguíneos. La linfa es muy importante tanto a nivel inmunológico como a nivel metabólico en menor grado, y es que los ganglios linfáticos se encargan, entre otras cosas, de producir anticuerpos y células para la defensa de nuestro organismo.
La linfa, los vasos linfáticos y los ganglios forman el sistema linfático. En este sistema el movimiento no se produce como en el sistema vascular de la sangre, donde el corazón impulsa la sangre para que llegue a todo el cuerpo y luego la recoge; en el sistema linfático la linfa es impulsada por los movimientos de los miembros tanto superiores como inferiores, por la leve contracción de los músculos cercanos a los vasos y por las arterias.
El drenaje linfático y la fisioterapia
El drenaje linfático es una parte importante dentro del campo de la fisioterapia. Son masajes realizados por fisioterapeutas expertos en el que se realiza una suave presión con las manos. Son masajes indoloros realizados mediante movimientos de arrastre.
Con el masaje linfático lo que se intenta es activar la circulación linfática a través de la estimulación de los vasos y los ganglios. Este produce un efecto sedante que relaja, libera tensiones y relaja toda la cadena muscular, mejorando de manera mucho más rápida cualquier lesión muscular.
Los masajes de drenaje linfático se centran principalmente en ingles y axilas, ya que aquí se encuentran los ganglios principales.
En Natufisio, nuestra consulta de osteopatía en Madrid, puedes ser tratado mediante estas técnicas de drenaje linfático, pero no siempre es esta la mejor opción según el problema de cada paciente. Por ello, la osteópata te recomendará si es lo que más te conviene o puede que haya otro tratamiento que te venga mejor y sea más rápido para ti.
Beneficios del drenaje linfático
El drenaje linfático es más conocido por sus beneficios estéticos. Este tratamiento favorece la eliminación de los desechos que el organismo genera de forma natural. Esto no solo favorece estéticamente al paciente si no que refuerza y mejora los resultados de otros tratamientos estéticos como pueden ser la liposucción, tras la cual siempre se realizan drenajes linfáticos para eliminar la grasa sobrante tras la operación.
De igual manera se puede realizar un tratamiento de drenaje linfático para tratamientos celulíticos, piel naranja… o para ayudar a rebajar esos hinchazones causados por la retención de líquidos.
Pero este tratamiento fisioterapéutico se realiza fundamentalmente por salud. Son muchos los casos en los que un drenaje linfático puede ayudar a aliviar dolores, rebajar hinchazones, a liberar la musculatura… y es que estos masajes alivian la sensación de pesadez y provocan además de la relajación del paciente, la relajación de la musculatura que nos ayuda a reequilibrar todo el cuerpo y así una mejora mucho más rápida.
Una de las causas más comunes por las que se acude al fisioterapeuta para este tipo de tratamiento es por traumatismos, accidentes o algún otro trastorno en los que se producen obstrucciones en los vasos linfáticos. Estas obstrucciones producen edemas cuyo mejor tratamiento son las técnicas de drenaje linfático, que mejorarán esas obstrucciones mejorando los edemas.
Uno de los casos en los que es fundamental el drenaje linfático es en el cáncer, sobretodo el cáncer de mama. Con el cáncer los ganglios linfáticos se ven muchas veces afectados y por ello, durante la operación se suelen quitar varios ganglios o incluso toda la cadena ganglionar por prevención, y para evitar que las células cancerígenas no vayan a otros sitios a través del sistema linfático y no se extienda ni se produzca metástasis.